Sevilla será sede de dos grandes proyectos de hidrógeno en apenas dos años

Cada vez están más cerca en Andalucía los proyectos relacionados con el hidrógeno verde, el vector energético del futuro. Dos de ellos empiezan a materializarse en Sevilla. Recientemente, el Diario ABC publica un extenso y clarificador reportaje sobre esta fuente de energía y sobre dos grandes iniciativas concretas que impulsan, a corto plazo, el hidrógeno y que estarán ubicadas en el Puerto de Sevilla y en el Polígono La Isla. En dicho reportaje, se menciona a ASIAN como uno de los agentes sociales que promueve el desarrollo y la implantación del hidrógeno en Andalucía. A continuación, reproducimos este interesante análisis.

«La revolución del ‘hidrógeno verde’ ha llegado a Sevilla con el inicio de los dos primeros grandes proyectos de inversión, que se ubicarán en el Puerto de Sevilla y en el Polígono de la Isla.

¿En qué consiste esta realmente tecnología? Aunque parezca quimérico, se trata de lograr un nuevo combustible con sol, viento y agua. La molécula de agua (H20) está formada por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno. En los últimos años se ha puesto de moda una frase de la novela ‘La Isla Misteriosa’ de Julio Verne, donde se sostenía —hace siglo y medio— que «el agua será un carburante, dado que el hidrógeno y el oxígeno que la constituyen, utilizados solos o conjuntamente, proporcionarán una fuente inagotable de energía y de luz con una intensidad que el carbón no alcanza».

Ese futuro ya está aquí. El hidrógeno se puede extraer del agua y utilizarlo para reemplazar en todos sus usos al gas natural. ¿Por qué no se ha hecho antes? La separación de los átomos se hace con un proceso denominado electrólisis, que utiliza electricidad de forma intensiva (lo que resulta muy costoso). Gracias a la reducción del coste de las renovables (como energía solar y eólica) se ha iniciado la carrera para lograr hidrógeno utilizando paneles solares o molinos eólicos. Y dado que en su producción no se generan emisiones contaminantes, se le denomina hidrógeno verde.

El desafío de la próxima década es poner a punto las tecnologías para fabricarlo, almacenarlo y consumirlo a gran escala, con lo cual se podría reducir la dependencia del gas natural.

Inicio en Sevilla

El pistoletazo de salida se ha dado en el Puerto de Sevilla, que contará con una instalación para producir este gas renovable en 2023. La compañía hispalense Alener está acometiendo en este momento una inversión de 4,4 millones de euros para instalar una planta solar (con tres megavatios de potencia) y un centro de producción de hidrógeno en el Polígono Astilleros que podrá generar en torno a 160 toneladas de hidrógeno al año, y abastecerá en principio a las empresas que se ubican en el entorno portuario.

El objetivo a medio plazo de sus promotores es multiplicar por trece la escala de esta iniciativa para captar nuevos clientes en el futuro (como la climatización de viviendas en el sector residencial o los vehículos). La planta deberá estar en funcionamiento en julio de 2023 para cumplir con los plazos de ejecución establecidos por Bruselas, ya que está cofinanciada por la UE a través de los Fondos Feder.

A muy poca distancia del Puerto de Sevilla, en el polígono La Isla, ha comenzado una iniciativa de mayor dimensión. La empresa sevillana SailH2 está promoviendo el proyecto denominado H2Green La Isla (entre cuyos socios está la firma sevillana Elmya), que contempla la producción, el almacenamiento y la distribución de este gas renovable. Esta propuesta requerirá una inversión de más de 25 millones de euros y ya ha sido asignado a la UAP (la Unidad Aceleradora de Proyectos) de la Junta de Andalucía, que agiliza todos los trámites administrativos.

En la primera fase —cuyo desarrollo ya ha comenzado— H2Green La Isla va a contar con una hidrogenera (para abastecer a vehículos) y una instalación para la producción de hidrógeno verde (mediante electrólisis del agua) que será capaz de generar, cuando esté a plena producción, unas 1.500 toneladas de hidrógeno de origen renovable al año. Esta instalación estará operativa en los próximos 18 meses. Junto a ello, la iniciativa también prevé hacer ‘blending’ (mezclar el hidrógeno en las tuberías de gas natural, en el que colabora Nedgia, la distribuidorade gas natural de Grupo Naturgy). Una tercera línea de trabajos será la producción de hidrógeno verde puro para canalizarlo directamente a empresas que están en el entorno o dentro del mismo polígono La Isla, que sustitutirán una parte del gas natural que consumen por hidrógeno para reducir las emisiones de CO2 y abaratar el coste de la factura de gas natural.

Junto a estas iniciativas, empresas como públicas como Emasesa han lanzado un concurso para buscar soluciones que incorporen hidrógeno verde en sus procesos para reducir su consumo de fuentes fósiles.

Polo científico

En Sevilla hay un polo de empresas que han sido pioneras en el desarrollo de tecnologías asociadas al hidrógeno verde. Abengoa fue una de las primeras empresas que apostó por este vector energético, lo que sirvió para desarrollar varios grupos de investigación en el seno de la Universidad de Sevilla (en la Escuela de Ingenieros de Sevilla se han desarrollado algunas de las primeras investigaciones en torno a las aplicaciones de este gas).

A partir de ahí, la ciudad cuenta con firmas netamente sevillanas como Clantech, del ingeniero Francisco Montalbán, que es especialista en la gestión y distribución de este hidrógeno (es uno de los líderes en el diseño de hidrogeneras). Junto a ello, el expresidente de Abengoa, Felipe Benjumea, preside H2B2, que diseña electrolizadores (los sistemas que generan el hidrógeno a partir de la electrolisis) y que ya lidera una iniciativa con la que producirá hidrógeno para automóviles en California. La empresa Inerco también ha entrado en este campo.

La Asociación Superior de Ingeniería de Andalucía (Asian) constituyó el pasado año la Mesa del Hidrógeno por el potencial de desarrollo que este nuevo vector energético puede tener en el sur de España.

Estas empresas están en el lugar idóneo en el momento adecuado. En 2021 se asistió a una escalada de los precios del gas natural y el petróleo que se ha agravado notablemente con la invasión de Ucrania, lo que ha reforzado el papel estratégico de las renovables (y el hidrógeno) para reducir la dependencia europea de terceros países. Según apuntan los expertos, se han alcanzado cotizaciones de 5,5 euros el kilogramos de gas natural, y con las tecnologías actuales se puede obtener un kilogramo de hidrógeno verde a ese mismo precio. Pese a todo, aún hay que desarrollar equipos e infraestructuras capaces de consumir ese hidrógeno.

Esta es la razón por la que los grandes proyectos de hidrógeno avanzarán más en los próximos años con el objetivo de producir este gas renovable a un precio competitivo (el gran reto es que alcance los 2,5 euros por kilogramo). La crisis de Ucrania ya ha llevado a la Comisión Europea a adoptar medidas extraordinarias para acelerar al máximo el desarrollo del hidrógeno verde en la próxima década.

Fuente: ABC de Sevilla

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