El 63 Congreso de Ingeniería Naval e Industria Marítima que se ha celebrado en Madrid ha reunido a más de 350 profesionales y expertos de un sector que, como han coincidido todos los miembros de la Sesión inaugural, presenta “una destacada posición de liderazgo a nivel mundial y europeo y extraordinarias oportunidades” pero una grave carencia, la de “suficientes ingenieros navales para atender la demanda actual y, sobre todo, futura”.
Diego Fernández Casado, presidente de la Asociación de Ingenieros Navales y Oceánicos de España, ha destacado el completo programa de esta nueva edición, que ha contado con más de 85 ponencias, 150 personas, 8 mesas redondas y la mirada técnica y científica y el compromiso histórico con nuestro patrimonio naval y ha recordado que “estas miradas y el futuro ilusionante de la profesión y del conjunto del sector depende de los egresados de esta escuela y las otras cuatro que ofrecen el máster de Ingeniería Naval”.
La decana del Colegio Oficial de Ingenieros Navales y Oceánicos, Pilar Tejo Mora-Granados, ha enmarcado la situación del sector naval a nivel internacional y ha destacado que “en un escenario de atonía mundial, especialmente en Europa, España tiene unas perspectivas mejores”.
En cuanto al mercado de la construcción naval, ha recordado que la actividad de los astilleros españoles se sitúa un 45% por encima del nivel de actividad previo a la pandemia aunque ha llamado la atención sobre el hecho de que, por primera vez, China aglutina más del 50% de la construcción de buques mundial. En línea con el conjunto del sector, la decana ha señalado que ante los retos de descarbonización “la flota mundial va a necesitar invertir en torno a 4 billones de euros. Sin duda, la industria tiene un reto pero una enorme oportunidad de desarrollo. Necesitamos el concurso de toda la sociedad implicada: empresas, administración, universidades y sociedad en general, para contar con ingenieros suficientes”.
Rodrigo Pérez Fernández, presidente de la Delegación en Madrid de la AINE y el COIN ha destacado que esta edición va a ser capaz de vincular el pasado con el presente y ha animado a los más jóvenes a estudiar ingeniería puesto que no solo ofrece perspectivas laborales sólidas sino que es una invitación a contribuir al progreso de la sociedad.
Fuente: Comunicación COIN-AINE